Fechas de publicación: 29/10/2019
Edificios futuristas, gente en bicicleta, calles libres del sonido del claxon, japoneses con kimono, hombres con pantalón y camisa blanca o azul -¿por qué se visten casi todos igual para trabajar?-, puestos con helados de té matcha - ¡quiero uno! -... Un escalofrío te recorre la espalda… Has entrado en otra dimensión, en una ciudad que no se parece a nada que conoces... ¡Bienvenido a Tokio! Si bien muchos dicen que Dubai es la ciudad del futuro, y en cierta forma lo es, Tokio supera todas las expectativas en este rubro y debo decir que es uno de los destinos más adictivos del planeta! Es muy cierto que viajar a Japón supone fascinarse gracias a esa mezcla de tradiciones milenarias con tecnologías de última vanguardia, pero así mismo llegar a Tokio es chocarse con la perfección misma, con todo lo que está bien en este mundo, con una maqueta de cómo debería ser la ciudad perfecta. Tan perfecta, que puede hacer que nos sintamos un tanto cavernícolas en ella y hasta que extreñemos un poco nuestra loca imperfección.
¿Quién iba a pensar que una aldea de pescadores iba a convertirse en uno de los núcleos urbanos más poblados del mundo? Nada más y nada menos que con 13 millones de personas. Lo verdaderamente alucinante es que su fundación data de 1457, año en que Ōta Dōkan construyó el castillo Edo, dando inicio, años más tarde, al periodo Edo. Terremotos, guerras, erupciones del monte Fuji y demás desastres, no han podido con ella. Es más, es uno de los principales focos económicos y tecnológicos de todo el mundo. La ciudad se compone de 23 distritos y cada barrio es como una mini ciudad, cada uno con un estilo único, con su propia personalidad y con algo que seguramente te hará amarlo. ¿Los más interesantes? Para los amantes del manga y el anime, Akihabara. Para los que buscan sumergirse en la historia de la ciudad, Ryogoku, que atesora el museo Metropolitano Edo-Tokio. Para los amantes del lujo y las compras, Ginza. Para los nocturnos, Roppongi. Para los ávidos de cultura, Asakusa, antiguo centro de Tokio, donde se encuentra el impresionante templo de Senso-ji y también para los amantes de la cocina la calle Kappabashi, con todo lo necesario para equipar tu cocina. Para alucinar, Shibuya y su célebre paso de peatones, el más transitado del mundo. Para unas vistas de infarto, Shinjuku y Oshiage con su Tokyo Skytree.
Sushi, ramen, tempura, soba, kobe, mochis, tonkatsu, bento box... Tokio es la cuna del buen comer con más de 240 restaurantes con estrella Michelin, izakayas, puestos callejeros o incluso la posibilidad de desayunar sushi en el mercado de Tsukiji.
Se trata del parque en las instalaciones del Palacio Imperial, lugar de residencia de la familia real. Puede ser visitado 363 días al año a excepción del 23 de diciembre (cumpleaños del emperador) y el 2 de Enero (Año Nuevo). Si puedes elegir la fecha para recorrer estos jardines no lo dudes, visítalos en primavera cuando todos los cerezos están en flor. ¡Para sacar miles de fotografías!
Tokio es una ciudad para todo el mundo, al igual que sus comercios. Por ejemplo, los café cómics ponen a nuestra disposición cientos de obras que leer junto a una fuente inagotable de bebidas por unos pocos yenes. En otros cafés, por ejemplo, también podemos tomar nuestra consumición rodeados de gatos. Pero no todos los locales son igual de inocentes, y es que Tokio también es conocida por sus locales variopintos para mayores de edad.
Así que si eres amante del anime y las caricaturas, si te fascina la gastronomía, si tu pasión son las compras y el lujo o si sueñas con un recorrido histórico y a la vez vanguardista no busques más porque Tokio lo tiene todo.
Ya vamos armando grupo para este 2021, te animas?
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